El rotativo destaca que el proyecto recibió luz verde anoche por parte del Comité de Planificación y Construcción del municipio de Jerusalén, el órgano de gobierno israelí para esa urbe.
No obstante, la publicación aclara que los israelíes podrán dar su opinión sobre el tema antes de su aprobación final.
Denominado Givat Hashoked, el vecindario se levantará al suroeste de la ciudad de Jerusalén cerca de la localidad palestina de Beit Safafa.
El nuevo plan es un golpe para nuestro pueblo porque impide su vinculación contra el resto de la urbe, denunció Ali Ayoub, jefe de la administración de Beit Safafa.
Este será el primer asentamiento construido directamente por el gobierno israelí dentro de un vecindario palestino en Jerusalén oriental, y no por representantes de los colonos, criticó el abogado David Seidermann.
“Se construirá precisamente donde el (ex) primer ministro israelí Isaac Rabin prometió al (ex) presidente estadounidense Bill Clinton no construir”, escribió en Twitter.
El jefe de la Comisión contra la Colonización y Resistencia al Muro de la Organización para la Liberación de Palestina, Muayyad Shaaban, advirtió la pasada semana que Israel planea construir tres mil 412 nuevas viviendas en Jerusalén Este.
La propuesta amenaza con expulsar a unos dos mil palestinos que viven en pequeñas comunidades beduinas como Jabal al-Baba, Wadi al-Jamal, Bir al-Maskoub y Wadi Snisil, subrayó el funcionario.
El experto Fakhri Abu Diab denunció el pasado mes que la creación de un cinturón de parques nacionales es el más reciente proyecto de Tel Aviv para aislar Jerusalén del resto de Cisjordania.
La idea es construir a expensas de los habitantes árabes de la urbe, detalló el investigador.
El objetivo es duplicar el número de colonos y crear un cordón de asentamientos israelíes conectados entre sí por nuevas carreteras y puentes, cuestionó.
Según diversas fuentes, unos 490 mil colonos israelíes viven a lo largo y ancho de Cisjordania y otros 200 mil en la zona oriental de la llamada ciudad santa, que la comunidad internacional considera la capital del futuro Estado palestino.
La mayoría de los países y el Consejo de Seguridad de la ONU reclaman la evacuación de esos asentamientos al considerar que están ubicados en territorio palestino ocupado.
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