«200 años de independencia hoy. 7 de septiembre debería ser un día de amor y unión por Brasil. Desafortunadamente, no es lo que sucede hoy. Tengo fe en que Brasil recuperará su bandera, soberanía y democracia», escribió Lula en redes sociales.
El príncipe portugués y primer emperador de Brasil, Don Pedro I (calificado de Libertador y Padre del gigante suramericano) fue el encargado de proclamar el 7 de septiembre de 1822 el Día de la Independencia en los márgenes del río Ipiranga, en Sao Paulo.
La víspera, el candidato presidencial del Partido de los Trabajadores (PT) acusó al mandatario de tendencia ultraderechista Jair Bolsonaro de usurpar al pueblo brasileño esta jornada de la emancipación para convertirla en un acontecimiento personal.
Bolsonaro trata esa fecha «como si fuera una cosa de él, cuando en realidad el 7 de septiembre es la conmemoración de una fiesta de interés de 215 millones de brasileños, porque después de todo es la independencia de nuestro país», apuntó el exdirigente obrero durante una reunión con el consejo político de partidos que apoyan su candidatura al poder.
Para el postulante del PT, el excapitán del Ejército «podría haber tenido la grandeza de hacer una gran fiesta para el pueblo brasileño participar, pero él decidió hacerlo para él, es suyo. Él, que ya ha dicho ‘mis Fuerzas Armadas’, está diciendo ‘mi independencia’. Es triste, pero es así», lamentó.
Bolsonaro participó en horas de la mañana en Brasilia del evento por la fecha. A la parada castrense asistieron jefes de Estado de tres países de habla portuguesa, el vicepresidente Hamilton Mourão, ministros del Gobierno federal y otras autoridades.
Por segunda vez, el gobernante encabeza un desfile en la Explanada de los Ministerios desde que asumió el cargo en 2019.
En 2020 y 2021, la efeméride se celebró en una pequeña ceremonia en el Palacio de la Alvorada (residencia oficial) por la pandemia de Covid-19.
Llamó la atención ahora las ausencias en la revista militar de los presidentes del Senado Federal, Rodrigo Pacheco; la Cámara de Diputados, Arthur Lira; y el Supremo Tribunal Federal, Luiz Fux. Todos fueron invitados, pero declinaron asistir.
En una red social, Pacheco señaló que las conmemoraciones del 7 de septiembre «necesitan ser pacíficas, respetuosas y celebrar el amor a la patria, a la democracia y al Estado de Derecho».
A menos de un mes del sufragio del 2 de octubre, Lula lidera todas las encuestas de opinión con un 45 por ciento de favoritismo, frente al 30 de Bolsonaro, quien ambiciona reelegirse.
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