El 13 de julio pasado iniciaron las conversaciones, en cumplimiento de uno de los puntos adoptados en el Acta por la Paz que puso fin a 18 jornadas de paro nacional por respuestas a asuntos sensibles para la población, convocado por a Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) y al cual se sumaron numerosos sectores sociales.
Fomento productivo, Energía y Recursos naturales y Control de precios, fueron las mesas técnicas concluidas en las negociaciones entre ministros de Estado y líderes de la Conaie, la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin) y el Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador (Feine).
Las partes decidieron mantener abierta la dedicada al subsidio focalizado a combustibles, el cual resulta el tópico más polémico de los 10 contenidos en la agenda, que debe terminar con soluciones, el 12 de octubre próximo.
La primera mesa en cerrar fue la de Energía y recursos naturales, cuyo documento final contiene acuerdos como establecer moratoria, por un año, en las actividades extractivas en 15 bloques petroleros en las provincias Pastaza y Morona Santiago (sur) y no otorgar nuevos títulos mineros hasta contar con las regulaciones requeridas para ese fin.
«Realmente no se ha avanzado en el tema petrolero y minero», aseguró sobre ese particular el presidente de la Conaie, Leonidas Iza.
Según explicó, las promesas del Ejecutivo son sobre los proyectos que aún no están en vigencia y aquellos en curso y con daños a las comunidades, permanecen sin definiciones.
En Fomento productivo, ambas delegaciones establecieron la creación de una política nacional de agricultura familiar y campesina, así como de créditos, pero no llegaron a consensos en el tema de formar una comisión destinada a definir los productos sensibles para negociar Tratados de Libre Comercio (TLC).
Específicamente, los representantes de la Fenocin mostraron total rechazo a los TLC y al respecto se acordó retomar a futuro ese particular.
Finalmente, Control de Precios fue uno de los más controvertidos, con unos cuantos puntos de desacuerdo, teniendo en cuenta que solo aprobaron valores para 13 productos, cundo el sector indígena presentí más de 40.
Según el Gobierno, habrá controles permanentes para evitar especulación, pero aún queda por definir bajo qué referencia y tabla de precios.
La Mesa de Combustibles, que debió terminar la víspera, continuará en sesiones durante el resto de los 90 días pactados para el diálogo.
«Los tiempos que se han fijado no han sido los más adecuados, siempre son insuficientes», estimó en un balance general el monseñor Luis Cabrera, presidente de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, ente mediador de las conversaciones.
A su juicio, fijar 90 días para temas de una complejidad que ha ido apareciendo poco a poco, realmente no va a hacer nunca lo más oportuno.
Para dar continuidad al proceso, el martes 13 de septiembre las partes instalarán las mesas de Derechos colectivos a Inseguridad, justicia y derecho, mientras que posteriormente los debates versarán sobre empleo, salud y educación.
El diálogo que está a punto de cumplir dos meses comprende demandas sociales de años, las cuales se han mantenido es espera de respuestas desde el Gobierno nacional.
El movimiento indígena, en representación de todos los sectores afectados, sostiene que permanecerá en las negociaciones hasta el final de las mismas, pero también alertó de otras acciones, en caso de no obtener soluciones a esos temas sensibles.
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