Imágenes difundidas junto a distintos reportes de prensa mostraron entre las reliquias a platos, jarrones, tazones y otras piezas de porcelana, algunas en perfecto estado y otras con roturas.
Se cree que el cargamento era parte de la mercancía que transportaba el barco, denominado Antiguo Naufragio Yangtse Número 2, desde Shanghái (este), entonces el punto inicial de la antigua ruta marítima de la seda.
Los trabajos continúan y se espera reflotar por completo la nave antes del cierre de este año.
En marzo pasado China comenzaron dichas labores en las costas de Shanghái, donde el buque está sepultado bajo el lecho marino y a una profundidad de 5,5 metros.
Según las investigaciones arqueológicas, mide unos 38,5 metros de largo y 7,8 metros en su punto más ancho en el medio.
Era un navío mercante que surcó los mares durante el reinado del emperador Tongzhi (1862-1875) de la dinastía Qing y sus 31 cabinas están cargadas de reliquias culturales como porcelana hecha en Jingdezhen, conocida mundialmente como la «capital de la porcelana».
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