El recuento puede condicionar qué partido encabezará el próximo gobierno sueco, pues los resultados del voto presencial otorgaron 155 de los 349 escaños del Parlamento, a las cuatro organizaciones de la derecha, con el ultraderechista Demócratas Suecos a la cabeza.
Mientras, el bloque de la izquierda se hizo con 154 asientos, a pesar de que el Partido Socialdemócrata de Suecia (PSS) de la primera ministra Magdalena Andersson fue la formación más votada, al reunir un 30,5 por ciento de los apoyos.
A las 11 de la mañana, cinco distritos habían dado por finalizado el escrutinio sin que se haya producido cambios en el reparto de escaños entre los ocho partidos, según el periódico The Local.
La mandataria se negó a dar por perdidas sus opciones de gobernar el pasado domingo y afirmó que «esa noche no iban a tener el resultado final».
Sin embargo, Ulf Kristersson, el líder del Partido Moderado expresó estar listo para conseguir un gobierno «nuevo y fuerte».
De acuerdo con analistas, aunque la suma de los escaños de la derecha alcanza para gobernar, la firma de un acuerdo podría complicarse, puesto que el Partido Moderado tiene que buscar la vía de justificar ser el líder de las cuatro organizaciones.
La tercera posibilidad sería una gran coalición con el PSS y el Partido Moderado, pero parece poco probable dados los precedentes de enfrentamientos y rivalidad entre ambas formaciones.
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