La entidad financiera elevó la tasa de interés desde el 1,75 por ciento al 2,25, su mayor cota desde 2011, con probabilidades de llegar hasta 3,0 por ciento durante el próximo invierno, unas proyecciones más “inciertas de lo normal”. En un comunicado el Norges Bank explicó que la subida de las tasas ocurre en un momento en que los bancos centrales mundiales intentan contener la creciente inflación.
Hace un año, recordó, el tipo de interés oficial era cero año y las subidas están empezando a tener un efecto restrictivo en la economía noruega.
Ese panorama puede sugerir una estrategia más gradual en la fijación de los tipos de interés oficiales en el futuro, agregó el ente emisor.
La moneda noruega cayó a 10,23 por ciento frente al euro previo el anuncio de los tipos.
De acuerdo Nordea Markets es probable que los tipos podrían subir 25 puntos básicos en el futuro, como estrategia para la contención de la inflación.
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