‘El aumento de la población erosiona los resultados del desarrollo y amenaza los principios de eficiencia, adecuación y sostenibilidad, provocando una disminución de la calidad de vida’, destacó la funcionaria durante una reunión con el Consejo Supremo de Regulación de Medios.
En el gigante norafricano, las tasas de desempleo y analfabetismo del 7,9 y el 25,8 por ciento, respectivamente, son indicadores que reflejan las repercusiones del problema demográfico, versa el comunicado oficial.
El fenómeno atenta además contra los esfuerzos nacionales por disminuir la pobreza, que afecta a 9,2 millones de familias, para un total de 33 millones de ciudadanos, según la base de datos del Ministerio de Solidaridad Social.
Parte de la estrategia estatal consiste en crear oportunidades laborales para mujeres y madres jóvenes, en aras de racionalizar su rol reproductivo.
En tal sentido, el gobierno dispuso un capital de mil 700 millones de libras egipcias (casi 109 millones de dólares) para financiar pequeñas y micro empresas, que aumentará a cuatro mil millones en 2022, subrayó Al-Kabbaj.
Otra dirección apunta hacia el perfeccionamiento de los servicios de crianza para niños, mediante el establecimiento de nuevas guarderías y el desarrollo de las ya existentes, sobre todo en las zonas rurales.
En Egipto viven 12 millones de menores entre cero y cuatro años, sin embargo, en las guarderías solo aparecen registrados un millón de ellos.
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