Ceban precisó que no existe problema con el combustible ruso, a pesar de que el Gobierno moldavo no cumplió con el acuerdo sobre los plazos para la firma de un acuerdo sobre el pago de la deuda, según destacó este sábado el propio funcionario en su canal de Telegram.
Una de las principales condiciones con las que la rusa Gazprom acordó en octubre del año pasado prorrogar el contrato de suministro de gas a Moldavia durante otros cinco años fue la devolución de la deuda por el combustible y los pagos puntuales.
En aquel momento, el ejecutivo moldavo se comprometió a contratar a un auditor extranjero para que revisara su deuda con Gazprom antes del 1 de mayo de 2022, pero esto no sucedió.
El vice primer ministro de Moldavia, Andrei Spinu, anunció que su país recibió una prórroga hasta el 1 de octubre, aunque la parte moldava insistió en un plazo hasta finales de marzo. Desde entonces, los altos funcionarios moldavos expresaron su preocupación por una posible suspensión del suministro de gas el 1 de octubre.
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