La víspera la Policía Nacional Civil (PNC) avanzó operaciones en la urbanización Los Chorros, del municipio de Colón, en La Libertad, donde según denunciantes en redes sociales, se esconden decenas de pandilleros.
Vamos a eliminar a la organización City Vagos Locos Salvatruchos, dijo un vocero policial cuando intensifican acciones en la zona
Mantenemos el compromiso de ubicar a los delincuentes y entregarlos ante la justicia, para poder llevar tranquilidad a la población de Tepecoyo y municipios aledaños, dijo la PNC.
Estas acciones en áreas limitadas del país donde se combinan fuerzas del Ejército y la Policía pudieran desarrollarse próximamente en varias demarcaciones con el fin de garantizar la limpieza de pandilleros, dijo el vocero.
El ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, explicó que piensan generalizar la experiencia adquirida en el municipio de Comasagua, donde se efectuó el primer cerco, y aseguró que eso “permitirá desplegar todo un trabajo de inteligencia para ubicar los reductos terroristas, medidas como esas las vamos a seguir replicando en otros territorios”, apuntó el funcionario.
Por otra parte, el ministro de Defensa, René Francis Merino Monroy, escribió en su cuenta de Twitter sobre la captura de otro terrorista de la estructura criminal responsable del asesinato de un ciudadano en Comasagua, departamento de La Libertad, que provocó el primer cerco.
Como resultado del enfrentamiento a las pandillas, algunos analistas como el criminólogo Ricardo Sosa, opinan que El Salvador podría colocarse con una tasa de nueve homicidios por cada 100 mil habitantes al cierre de 2022.
Sin embargo, medios de prensa como La Prensa Gráfica, destacaron que en los últimos cinco días ocurrieron ocho homicidios en el país, lo que provocó críticas contra el gobierno que solo informa de crímenes de las pandillas.
Al respecto, la jefa jurídica en seguridad de Cristosal, Zaira Navas, advirtió que las medidas como el régimen de excepción y los cercos militares no constituyen políticas públicas para prevenir delitos comunes y menos la presencia de estructuras criminales.
«El régimen de excepción mostró varias cosas después de seis meses de su implementación. Una de ellas es que, aunque hay una reducción significativa de todos los delitos, reconoció, siguen ocurriendo crímenes graves como los registrados el pasado fin de semana, pues no están siendo atacadas las causas estructurales de la criminalidad», remarcó.
La activista apuntó que los hechos sucedidos durante los últimos días muestran que las pandillas mantienen el control en varios de los territorios del país y que únicamente cambiaron su modalidad.
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