Organizada en colaboración con el Museo de la Danza, la muestra parte del legado de la prima ballerina assoluta Alicia Alonso, piedra angular en el desarrollo de esta disciplina en la isla y ejemplo para las destacadas discípulas Loipa Araújo, Aurora Bosch, Josefina Méndez y Mirta Plá.
Bajo el título Joyas en escena, la exposición se inserta entre las actividades de la Oficina del Historiador de La Habana durante la Jornada por la Cultura Cubana, que acontece en la mayor de las Antillas desde el 10 y hasta el 20 de octubre.
«Durante las décadas de los 40 y 50 del siglo pasado, el éxito y la fama de Alonso crecían en los Estados Unidos y el mundo en general», apunta la presentación del proyecto, el cual recoge piezas devenidas testimonio del prestigio y el reconocimiento alcanzados por ella.
En ese sentido, destaca en la selección, proveniente del catálogo del Museo de la Danza, la pulsera que recibió en 1954 tras aparecer en el programa televisivo This is your life y el Premio Dance Magazine, otorgado a Alonso en 1956.
Asimismo, el texto resalta la labor de la Premio Nacional de Danza (1998) más allá de «sus triunfos individuales», pues impulsó el desarrollo de este arte con la fundación de la compañía conocida actualmente como Ballet Nacional de Cuba (1948) y una escuela.
«Entre los frutos más notables de estas instituciones estuvieron Araújo, Bosch, Méndez y Plá, posteriormente conocidas como las cuatro joyas», cuyo talento y vocación mereció la atención especial de su maestra, recuerda el documento.
De hecho, la muestra exhibe algunos de los programas de las funciones protagonizadas por Alonso en Estados Unidos, con la presencia de las cuatro pupilas, como el ballet Coppelia en el Teatro Griego de Los Ángeles, en julio de 1959.
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