El concierto inaugural en la Basílica Menor del Convento de San Francisco de Asís regaló al público las melodías de compositores como Julián Orbón, José Ardévol, Manuel Ponce, Aldo López Gavilán y Jorge Amado.
El cuarteto Catalyst, de Estados Unidos, también se ganó los aplausos del público; así como las interpretaciones del guitarrista Diego Ríos y los hermanos López-Gavilán: Aldo al piano e Ilmar con el violín.
Los recitales previstos como parte del evento se extenderán a la Casa de las Américas, la Biblioteca Nacional José Martí y la Fábrica de Arte Cubano, todos en la capital cubana, hasta el 5 de noviembre.
Celebrará además los 80 años del pianista Cecilio Tieles, e intervendrán también el músico Marcos Madrigal, la flautista Niurka González, la guitarrista Millet Padrón, el dúo Promúsica, el Coro Nacional de Cuba dirigido por la maestra Digna Guerra y la Orquesta de Cámara Música Eterna, bajo la batuta de Guido López-Gavilán, presidente del festival.
Según los organizadores, se prevé un amplio programa de presentaciones, marcado por la diversidad de sonoridades y artistas, así como encuentros teóricos, los cuales acontecerán en la sede de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), promotora del evento.
Los días 1 y 2 de noviembre, a partir de las 09:30, hora local, se realizarán coloquios en la sala Rubén Martínez Villena de la Uneac.
La ocasión servirá para homenajear a reconocidas figuras de la cultura cubana como Enrique González Mantici, Gisela Hernández, Manuel Duchesne Cuzán y Federico Smith.
Las presentaciones concluirán el 5 de noviembre en la Basílica Menor de San Francisco de Asís, a las 18:30, con el concierto especial Abrazo entre Festivales, que dará paso al Festival Habana-Clásica.
Convocado por la Asociación de Músicos de la Uneac, el Festival de Música Contemporánea de La Habana nació en 1984 como consecuencia del Festival de Música de los Países Socialistas y los Encuentros de Música Cubana.
En un principio contó con la presencia de compositores fundamentales de la música del siglo XX, como Luigi Nono, así como maestros de la escuela polaca, soviética y compositores latinoamericanos.
Desde entonces, el encuentro busca promover la mejor música contemporánea internacional, difundir la nueva creación, rescatar obras clásicas y educar al público en un momento histórico de la gestación de la música universal o cubana.
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