Imex Group, en su momento investigado por su supuesta responsabilidad en el incendio de un almacén de municiones en octubre de 2014, ahora exige castigo para quienes facilitaron información a la prensa sobre ese incidente.
La empresa presentó cargos contra el jefe de la policía checa, Yan Sveider, por revelar datos secretos sobre una investigación del hecho de hace casi siete años y exigió un castigo penal contra el funcionario.
El Gobierno del primer ministro Andrej Babis señala que en las detonaciones ocurridas en el fortín de Vrbetice estuvo implicada la seguridad y la inteligencia militar rusas, algo que Moscú consideró una acusación desatinada e infundada.
Sveider es acusado de reunirse el pasado 20 de abril con el presidente Milos Zeman, a quien le proporcionó detalles de una pesquisa, revelados luego por el jefe de Estado, al señalar que había al menos dos versiones de lo ocurrido en 2014.
El gabinete checo se muestra cerrado al reconocimiento de cualquier otra causa del referido incendio que no sea la de implicar a Rusia, todo lo cual llevó a una crisis diplomática entre ambas naciones.
Praga anunció el 17 del mes último la expulsión de 18 funcionarios de la embajada rusa en esta capital, a lo que Rusia respondió con la declaración de persona non grata de 20 diplomáticos checos.
Medios de prensa locales recuerdan que el 15 de octubre de 2014, un día antes del siniestro, el propietario de Imex Group, Peter Bernatic Junior, visitó el almacén, donde los empleados disfrutaban de un día libre.
En febrero del mencionado año, la policía checa retuvo a Bernatic por 48 horas como parte de una indagación, destacó la televisión capitalina.
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