De hecho, el token de FTX se desplomó casi una cuarta parte antes del anuncio de compra desde Binance, su principal rival entre los soportes de «exchange», por una llamada de auxilio a raíz de una «crisis de liquidez».
El activo en cuestión, que otorga a los titulares descuentos en las tarifas comerciales de la firma y es conocido por FTT, se desplomó más de un 30 por ciento, a 15,41 dólares, su mínimo desde principios de 2021.
Entre los criptoactivos, tanto el éter como el bitcoin llegaron a perder un seis por ciento de su valor. En el caso del segundo, reportó un precio de 19 mil 351 dólares, su nivel más bajo en dos semanas y cerca de su peor jornada desde mediados de septiembre.
El domingo, el jefe de Binance, Changpeng Zhao, dijo que su empresa liquidaría sus tenencias del token de FTX debido a «revelaciones recientes» no especificadas. Desde entonces, FTX sufrió las presiones financieras derivadas.
Su fundador, Sam Bankman-Fried, dijo después que la compañía marchaba «bien» y las preocupaciones se basaban en «rumores falsos».
Sin embargo, este martes el fundador de Binance anunció a través de Twitter que FTX, con quien ha mantenido una enemistad pública, le ha pedido «ayuda» y por tanto ha firmado un acuerdo «no vinculante» para adquirir la plataforma y «proteger a sus usuarios». Ninguna de las partes dio a conocer el monto de la transacción.
Hay mucho que cubrir y llevará tiempo: es una situación muy dinámica, y estamos evaluándola en tiempo real. Binance tiene el criterio de retirarse en cualquier momento, indicó Zhao, que anticipó una «alta volatilidad» en el FTT.
Por su parte, Bankman-Fried reconoció esos problemas de liquidez y agradeció la intervención de su rival.
Señaló, además, que la operación no afecta a las filiales estadounidenses de Binance y FTX, que son «dos compañías separadas», concretando que las retiradas de dinero en su plataforma están funcionando con normalidad y que cuenta con fondos.
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