En un mensaje a los guatemaltecos desde su cuenta en Twitter, el togado admitió que nunca antes como ahora comprende la verdad de esa frase, luego de 24 años de carrera en defensa del imperio del Estado de Derecho en su país.
«Quisiera poner de conocimiento que en estos momentos la independencia judicial está siendo manipulada y no se están cumpliendo las garantías constitucionales y el debido proceso», aseguró.
Gálvez rememoró que durante su trabajo en el Organismo Judicial conoció procesos a estructuras del crimen organizado, de corrupción y especialmente los del conflicto armado.
En ese sentido, afirmó que siempre trató de transparentar los juicios y prueba de eso es que la población les dio seguimiento, especialmente a las audiencias y resoluciones.
Igualmente, ratificó que cumplió siempre con todas las garantías y pidió a la ciudadanía organización «para que no se roben las posibilidades de una justicia que todos añoramos».
«Voy a estar a la expectativa de todo lo que está pasando en Guatemala, especialmente para que podamos vivir el anhelo de justicia», recalcó.
El 4 de noviembre, el Instituto de Migración anunció la salida del país del juez de Mayor Riesgo, y un día después este confirmó que había viajado a un evento en Costa Rica como parte de sus vacaciones.
Ese día debió presentar las pruebas de descargo en relación al antejuicio que enfrenta, pero en su lugar acudió su abogado defensor Herbert Pérez.
También en un mensaje al pueblo, Gálvez argumentó su decisión a que no se le garantizó la publicidad como requisito de transparencia.
Asimismo, indicó que la Fundación contra el Terrorismo busca enjuiciarlo por el abuso de la figura de la prisión preventiva -la cual no inventó-, en cinco casos y él solo intervino en tres.
La Corte Suprema de Justicia dio trámite a la solicitud de antejuicio identificada con el numeral 111-2022 «por el supuesto delito de prevaricato (entre otros) por haber aplicado la prisión provisional de forma reiterada», recordó.
La petición coincidió con la resolución del Tribunal al mando del magistrado de enviar a juicio a nueve exmilitares y expolicías por asesinatos cometidos durante el conflicto armado interno (1960-1996). Días después, enfrentó intimidaciones por parte de miembros de la Fundación contra el Terrorismo, lo cual lo llevó a pedir protección de la Corte Interamericana de Justicia.
En reciente entrevista, Gálvez señaló que con esas acciones se busca sacarlo de la jugada como lo han hecho con otros administradores de justicia independiente, que solo tuvieron como camino el exilio.
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