De acuerdo con la Administración Estatal del Monopolio del Tabaco, en lo adelante una persona solo podrá llevar consigo seis unidades y 90 cartuchos de repuesto con hasta 180 mililitros de nicotina.
También se restringió a uno diario la cantidad de conjuntos de cigarrillos con sus recambios que cada individuo puede adquirir.
Se trata del paso más reciente de China para establecer un orden en el desarrollo de una industria, que creció 36 por ciento el año pasado y generó ganancias por más de 27 mil millones dólares.
El gigante asiático es el principal productor y exportador del mundo de los cigarrillos electrónicos, pero el pasado día 1 el Gobierno puso en vigor impuestos de 36 por ciento a su fabricación y exportación, mientras tasó con 11 por ciento la comercialización.
En octubre implementó fuertes regulaciones y estándares obligatorios en el sector. Por ejemplo, prohibió los modelos con sabores a frutas, la publicidad dirigida a menores de edad y los anuncios en los medios de comunicación, lugares públicos y en el transporte.
Ordenó que su concentración de nicotina no puede sobrepasar los 20 microgramos, no deben contener impurezas, metales pesados y contaminantes, y sí incluir funciones para evitar que los niños los enciendan.
Los fabricantes necesitan licencias de la Administración Estatal del Monopolio del Tabaco, deben operar con estricto cumplimiento de las leyes aprobadas para el sector y no pueden vender sus productos cerca de ninguna escuela.
Desde 2021 China también promueve entre la población fumadora no recurrir a esos aparatos como alternativa mientras trata de dejar el vicio, causante de enfermedades que provocan alrededor de un millón de muertes cada año.
Se sumó a la lucha contra los vaporizadores luego que activistas y expertos llamaron a regular de forma estricta su publicidad, pues preocupa que es contraria al plan nacional orientado a promover estilos saludables de vida.
Los entendidos criticaron que la promoción de los cigarrillos electrónicos conlleva al tabaquismo, sobre todo en la juventud, y de hecho varias investigaciones revelaron que lo usan 70 por ciento de los estudiantes de la enseñanza preuniversitaria en China.
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