Un balance de la cartera indicó que el 53 por ciento de las escuelas están operativas, la mayoría de ellas en el departamento Sur, seguido de Centro, Nippes, Grand Anse, Oeste y Noroeste.
Con menos del 50 por ciento de sus centros docentes abiertos figuran los departamentos Sureste, Artibonite, Noreste y Norte, en estos dos últimos con solo entre el 12 y el 14 por ciento de las escuelas en funcionamiento, precisó el comunicado.
La cartera aseguró que ajustará el plan de estudios para permitir a los menores acceder a todos los contenidos del año académico.
Asimismo, anunciaron la semana pasada que el libro único para los dos primeros años de primaria estará disponible en enero.
El texto fortalece la enseñanza en criollo, lengua materna de más del 95 por ciento de la población de Haití, y además tiene como objetivo aprovechar mejor la francesa, segundo idioma oficial del país.
De acuerdo con el ministro Nesmy Manigat, la iniciación de la lengua criolla desde el primer año de la educación básica es una forma de cambiar la percepción de la gente sobre el idioma nacional y corresponde al Ministerio proporcionar a los estudiantes las herramientas necesarias para dominar su lengua materna lo antes posible.
El libro único promoverá cinco materias fundamentales: criollo; francés para la comunicación oral; matemáticas; ciencias sociales y ciencias experimentales y permitirá garantizar una base común de aprendizaje, habilidades, temas básicos de cultura y conocimiento para todos los niños.
La profunda crisis multidimensional que sufre Haití afectó notablemente la educación, y decenas de escuelas de barrios vulnerables tuvieron que cerrar sus puertas, mientras otras están obligadas a pactar con las pandillas para operar.
En los últimos dos meses se sumó el desabastecimiento de combustibles y las protestas antigubernamentales que ralentizaron el inicio del año académico, lo cual afectó a más de cuatro millones de alumnos.
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