En un análisis del Centro de Estudios Turísticos de la ciudad de Florencia, capital de la central región de Toscana, se señala que en estos días la demanda nacional sigue siendo mayoritaria, con 8,6 millones de personas que disfrutarán vacaciones en diversos destinos de su país, para un incremento del 2,2 por ciento respecto a 2021.
Las regiones más favorecidas en general son las del centro, con 33,0 por ciento del total de visitantes, mientras que en el sur y en las islas el flujo turístico cubre solo 19,0 punto porcentuales, indicó Vittorio Messina, presidente de Assohotel, la asociación comercial que reúne a las empresas italianas de alojamiento.
«Las previsiones son positivas, y dan esperanza de que la recuperación continúe también en 2023», señaló Messina, quien añadió ese último estudio, el cual incluyó una encuesta entre mil 334 hoteleros, mostró que para mantener ese avance “es necesario resolver nuevos y viejos problemas críticos”, como el alto costo de la energía.
El 72,0 por ciento de los viajeros extranjeros que llegan a Italia proceden de naciones de la Unión Europea, principalmente de Alemania, Francia, Países Bajos y Bélgica, aunque también se destaca el ingreso de turistas suizos, británicos y estadounidenses, apuntó la fuente.
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