Tras los impactos de la Covid-19, aún no se recuperan los niveles prepandemia, según estadísticas del propio Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel) y la más reciente medición del Índice de Confianza del Consumidor Panameño (ICCP).
Un informe de Mitradel señala que este año mensualmente se sellaron unos 20 mil contratos nuevos, superior a los 11 mil registrados en 2020 y los 18 mil contratos en 2021, lo que refleja una recuperación del trabajo formal a nivel nacional.
Sin embargo, en su conjunto, la cifra hasta noviembre de 2022 sería inferior en 38 por ciento a los 352 mil 370 tramitados entre enero y noviembre de 2019, año previo a la enfermedad.
Por su parte el ICCP arrojó que el 98 por ciento de los encuestados dijo no tener empleo o ven difícil conseguirlo en los próximos 12 meses.
La percepción en noviembre último también continúa desalentada, ya que el 57 por ciento de los entrevistados considera que no tendrá empleo, el 41 por ciento piensa que es poco probable obtenerlo, mientras que apenas el 2,0 por ciento estima que es bastante probable que lo tenga.
Este mes también se añade el anuncio del cierre de operaciones comerciales de Minera Panamá, que supera los seis mil empleados, mientras que otros sectores que tradicionalmente son generadores de plazas formales y permanentes están rezagados, de acuerdo con la muestra.
Sin embargo, las cifras que maneja el Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral apuntan que se observa una clara recuperación del empleo en relación al 2020 y 2021, pero el país está generando 38 por ciento menos empleos formales que en 2019 y 10 mil nuevos informales por mes.
Para el consultor empresarial René Quevedo, la alta precariedad y temporalidad laboral son fenómenos estructurales, síntomas del deterioro de la confianza para la inversión privada en el país, particularmente en sectores como comercio, construcción, industria, logística y servicios, que hoy aportan nueve de cada 10 nuevos informales.
Por su parte el director de Empleo de Mitradel, Alfredo Mitre, ha manifestado que para lograr alcanzar las cifras del 2019, que rondaban por mes unos 31 mil contratos nuevos, se avanza en orientar y formar a la población hacia nuevas oportunidades en el mercado laboral actual.
El desempleo, la informalidad laboral y los despidos masivos, entre otros problemas, fueron eje de las protestas populares que en julio de este año paralizaron al istmo y obligaron al Gobierno a establecer una mesa única de diálogo con las organizaciones sociales.
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