El colectivo se refirió en un comunicado a las recientes declaraciones de la diplomática que demandó a los diputados de la Asamblea Nacional (parlamento) que aprobaran una ley de extinción de dominio, con la que se pretende supuestamente enfrentar el blanqueo de capitales, la corrupción y el narcotráfico, entre otros delitos.
Acerca del proyecto legislativo que se encuentra en debate en una subcomisión técnica, Conato indicó que el país tiene respetadas organizaciones que cuestionan esa herramienta jurídica por su contenido e implicaciones.
También señaló en su mensaje que las declaraciones de Aponte ponen en evidencia la vieja política de los representantes diplomáticos norteamericanos “que se resisten a aceptar que somos un país soberano, tanto como lo es Estados Unidos, para decidir nuestras leyes en la forma y fecha que así lo decidamos».
En ese sentido el gremio obrero repudió la arrogancia de la embajadora sin estridencias coyunturales «con la genuflexión de sectores oficiales y privados que suelen perder el ADN de la dignidad y el decoro cuando les corresponde asumir posiciones ante los representantes de los Estados Unidos”.
Conato rechazó lo que llamó pretensiones irrespetuosas y señaló además que Panamá no puede darse el lujo de legislar a la carrera ni por presiones indebidas, sin considerar la complejidad internacional y nacional de la criminalidad.
En el texto, la organización obrera abogó por la transparencia en el proceso legislativo y una amplísima participación ciudadana, al tiempo que recomendó dar seguimiento puntual a “la trayectoria de la embajadora para anticiparnos y rechazar injerencias en materias que son propias de la nación panameña”.
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