“Con anterioridad a la llegada de este navío los barcos chinos se descargaban en Bandar Abás y su carga se trasladaba a Chabahar en barcos más pequeños”, aseguró el director gerente de la Zona Libre Comercial e Industrial de Chabahar, Amir Moqadam.
Desde iniciada la jornada se trabaja en las labores de descarga del buque, según confirmó Moqadam ante medios locales, y remarcó que en lo adelante los comerciantes podrán importar directamente, con costos más bajos.
La motonave tiene capacidad para transportar seis mil 500 contenedores, por lo que la puesta en marcha del servicio actual los costos tradicionales se abaratan a razón de unos 400 dólares por cada contenedor.
Otra de las ventajas de la línea naviera directa es que se acortan los tiempos de carga y descarga de las mercancías, traducido en la práctica en una ganancia de 10 días que antes se empleaban para el trasbordo a través de un puerto intermedio.
En la novedosa propuesta operan de forma cooperada la Zona de Libre Comercio de Chabahar, el Grupo de líneas navieras de la República Islámica de Irán y la Organización de Puertos y Navegación del país persa.
Una ventaja que eleva el tráfico naviero resulta la situación georgráfica teniendo en cuenta que Chabahar resulta el único puerto iraní en el mar de Omán, la salida directa a aguas internacionales por la vía del océano Índico.
Con esta iniciativa ambos Estados suman fuerzas para neutralizar las sanciones y contrarrestar el unilateralismo estadounidense, mediante una política económica enfocada en la búsqueda de la autosuficiencia en sectores clave y orientada hacia el Este.
La República Islámica expande así sus potencialidades y pone estas opciones a disposición de países vecinos y otros asiáticos, en aras afianzar sus lazos comerciales a corto, mediano y largo plazos.
Irán y China firmaron un histórico acuerdo de asociación estratégica integral de 25 años en marzo pasado, lo que elevó sus relaciones bilaterales a un nivel “integral y estratégico”, según las autoridades de Teherán.
Esa alianza chino-persa, a criterio de expertos, constituye un desafío para Estados Unidos, un enemigo de Irán y rival comercial de China.
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