“Queremos llamar a los cientistas e investigadores para que coadyuven en los estudios que requiere esta población de guanacos que prácticamente, a partir de ahora, es el tesoro más preciado en Bolivia”, afirmó el viceministro de Medio Ambiente, Magín Herrera, en conferencia de prensa.
Aseguró que se trata de una gran noticia para el país altiplánico y para el mundo.
Este animal es el más grande de los camélidos silvestres sudamericanos y se caracteriza por su robustez con cuello esbelto y patas largas.
Los expertos lo describen como un mamífero artiodáctilo salvaje de la familia Camelidae, a diferencia de la llama, que es doméstica.
Insistió Herrera en que se deben realizar estudios genéticos y genealógicos, de forrajes y sobre cómo garantizar agua en la zona, elementos imprescindibles para la subsistencia de esta especie.
Anunció que se llevarán a cabo acciones encaminadas a resguardar el espacio territorial donde los camélidos fueron identificados, incluidas medidas que eviten el asentamiento de pobladores en las cercanías.
“Necesitamos que nuestras comunidades no vayan a ocupar esas pequeñas áreas —36 mil hectáreas— donde se encuentran los ejemplares, que son una belleza”, dijo ante la prensa.
El hallazgo lo confirmó una expedición al lugar de un equipo técnico del Viceministerio de Medio Ambiente, Biodiversidad, CambiosClimáticos y Gestión de Desarrollo Forestal, el cual consiguió imágenes y vestigios de los animales.
(Tomado de Orbe)