El titular del egislativo, Nabih Berri, llamó a los 128 diputados a participar en la jornada de votación número 11, en busca de designar al próximo jefe de Estado para los siguientes seis años.
La convocatoria sucederá en medio de la insistencia de bloques parlamentarios, políticos, movimientos y líderes religiosos de no desperdiciar más tiempo y acudir a la vía del diálogo para poner fin al vacío de poder.
En este escenario, la Coordinadora Especial de Naciones Unidas para Líbano, Joanna Wronecka, enfatizó en la urgencia de la elección presidencial y en el funcionamiento pleno de las instituciones del Estado como puntos claves para reconstruir la confianza en el futuro de los libaneses.
Según analistas locales, la convocatoria de pasado mañana repetirá el guion de las anteriores cuando las papeletas en blanco dominaron y ningún candidato logró la mayoría parlamentaria de 65 votos.
Desde la noche del 31 de octubre, la nación levantina atraviesa por el cuarto vacío de poder después de su independencia, tras la conclusión del mandato de Michel Aoun, en ausencia de consenso político y bajo un Gobierno interino de limitados poderes constitucionales.
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