De acuerdo con la fuente, la última ola de casos se detectó en la central provincia de Maidan Wardak, donde los médicos alegan que las afectaciones mentales han aumentado entre las féminas, sobre todo después de la prohibición del trabajo y la educación para ese sector.
Debería haber paz y las mujeres deberían ir a trabajar. Le pedimos al Emirato Islámico (gobierno Talibán) que permita que las mujeres trabajen y estudien, declaró el médico Hekmat Wiar.
Por su parte, los funcionarios del territorio alegaron que, si bien el tema del empleo y la educación de las mujeres es un asunto del liderazgo del Emirato Islámico, el aumento de las enfermedades mentales es un problema que afecta a todo el mundo.
Este es un desafío universal, que no solo existe en Afganistán, sino en todo el mundo, dijo al respecto el jefe de la oficina del gobernador provincial, Ahmadullah Nezami.
Esto se produce cuando el Ministerio de Salud publicó informes sobre el aumento de la violencia doméstica en los últimos meses debido al aumento de la pobreza y el desempleo en Afganistán.
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