En un artículo publicado en el diario El Día, el comunicador señaló que en el gigante suramericano, como en casi todas partes del mundo, existen sectores demócratas solo si ganan, pero cuando pierden o se sienten inseguros, “pueden ser más fascistas que Benito Mussolini, si se lo permiten”.
“Y por más que a uno le duela, hay millones de brasileños, sobre todo de clase media o pobres alienados, que siguen a Jair Bolsonaro y creen en sus delirios, al punto de llegar a cometer actos de vandalismo como los registrados durante el asalto al Palacio, al Congreso y a la Suprema Corte”, agregó.
Lo mismo, sostuvo, que millones de estadounidenses adoradores del expresidente estadounidense Donald Trump, quienes hace dos años protagonizaron un asalto al Capitolio, una gran locura.
Marte expuso que mientras más conservador es un sector o una clase, más cobardes y por tanto más peligrosos se vuelven, acostumbrados a estar arriba. Los ultraconservadores son capaces de hacer las cosas más absurdas por miedo a perder el poder o a un enemigo alojado en sus mentes.
Pero esta vez la intentona fue fallida, agregó, y «su principal instigador hoy finge estar enfermo en Miami. ¡Qué casualidad, Miami!», sin embargo, expresó, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva salió fortalecido, por el momento.
Finalmente, el periodista alertó al gobierno de Lula pues “sus enemigos harán lo imposible por impedirle gobernar en paz. Los bolsonaristas, que tienen una gran fuerza en el Congreso, cuentan con el apoyo de gran parte del empresariado, grupos racistas y muchas iglesias evangélicas, harán todo lo cuanto esté a su alcance para derrocarlo.
Pienso que Lula podrá sortear los grandes obstáculos que hoy tiene por delante. Será como guiar un barco en medio de un tsunami, pero debe hacerlo bien. Mientras, y aunque le cueste asimilarlo, la derecha tendrá que aceptar los tiempos han cambiado y los pueblos demandan más derechos, más democracia, más bienestar, más equidad para todos, concluyó.
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