En rueda de prensa virtual sobre la situación de la pandemia en las comunidades indígenas, varios fueron los planteamientos relacionados con el panorama actual, no solo de la pandemia en esos territorios, sino también acerca de lo que consideraron ineficacia del ejecutivo para atender las necesidades sanitarias y económicas del país.
Al respecto, el presidente de la Conaie, Jaime Vargas, criticó la gestión del estado y tildó al gobierno de «incompetente, que no responde a las verdaderas necesidades y realidades del pueblo».
En ese marco, advirtió que ante la falta de atención por parte de la administración a las nacionalidades indígenas, la Conaie estableció su propio protocolo, signado por las sugerencias de la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud.
Cerrar el acceso a las comunidades, fortalecer la guardia indígena para mantener la seguridad de esos pueblos, entregar cartillas con información y protocolos a fin de combatir la expansión de la nueva cepa de coronavirus, así como dar valor a la medicina ancestral, son algunas de las medidas adoptadas.
Vargas también se refirió a los dos proyectos de leyes económicas, presentados por el ejecutivo a la Asamblea Nacional, criticados por varios sectores de la sociedad ecuatoriana y actualmente en debate en el pleno del legislativo.
«Asambleístas, exigimos tomar medidas, decisiones, pensando en la vida del pueblo ecuatoriano, no en los intereses del gobierno, ni de los grandes grupos económicos», enfatizó sobre ese particular.
En su criterio, con las propuestas y las acciones del estado, son los obreros, las familias, las comunidades, los sectores populares, la clase media y baja, los grupos golpeados.
Asimismo, expresó respaldo de la Confederación a la lucha, mediante manifestaciones, que han desarrollado los estudiantes de nivel superior, por el recorte planteado al presupuesto anual de las universidades públicas. Por otra parte, fue tajante, al rechazar cualquier posibilidad valorada por el gobierno, para poner fin al subsidio a los combustibles, decisión que desató 11 días de protesta social continua a nivel nacional, el pasado mes de octubre.
«Quitar subsidios significa un golpe mortal a los sectores populares», sentenció y recordó que en octubre pasado, a raíz de las protestas, la Conaie rehusó, frontalmente, cualquier determinación en contra de la ciudadanía, en especial, los grupos con menos recursos.
Finalmente, convocó a la unidad nacional para luchar por defender la vida y adelantó que recurrirán a las acciones necesarias, a su debido tiempo, si avanza la idea de eliminar los subsidios a la gasolina extra y el diésel.
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