En un encuentro con el primer ministro interino, Najib Miqati, la representante del organismo multilateral insistió en la urgencia de elegir un presidente de la República de acuerdo con la constitución.
Ambas partes discutieron la volatilidad institucional, las preocupaciones educativas y las formas en que las Naciones Unidas pueden ayudar al país a enfrentar los desafíos de la crisis.
Desde el pasado 31 de octubre, Líbano sortea el cuarto vacío de poder después de la independencia, en ausencia de consenso político y bajo un gobierno interino de poderes constitucionales.
Tras 11 sesiones en el Parlamento, ningún candidato de la comunidad cristiana maronita cuenta con el respaldo de la mayoría absoluta y la prolongación de la vacancia presidencial complejiza el escenario de la nación levantina.
En este contexto, entidades de Naciones Unidas avizoraron un empeoramiento de la realidad libanesa entre enero y abril del actual año con cifra superior a los dos millones 26 mil ciudadanos en fase de crisis ante la imposibilidad de acceder a alimentos y otras necesidades básicas.
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