Los establecimientos para consumo de alimentos y bebidas pueden servir ahora a los clientes en la mesa, pero con una distancia de dos metros y un máximo de 50 por ciento de capacidad en el área interna.
Gimnasios también reabren, pero limitados a un tercio de su capacidad y solo con programación previa. Los bailes están permitidos de nuevo, siempre y cuando no haya contacto físico, así como las clases de natación.
En las actividades al aire libre, se permite ahora el entrenamiento funcional individual en la playa. Los salones de belleza y las barberías, autorizadas anteriormente para solo ofrecer cortes de pelo y manicuras y pedicuras, pueden contar con servicios de depilación y tintes de pelo.
Los estudios de tatuajes también pueden reabrir. Pero todo ello con estrictos requisitos, según el protocolo de cada actividad, y siempre que se cumplan las reglas de oro del distanciamiento social y el cuidado de la higiene para evitar la propagación del nuevo coronavirus.
El ayuntamiento recordó en la red social Twitter que éste es el comienzo de la tercera fase del plan de reapertura, que permite «reabrir gimnasios, bares, restaurantes, servicios de depilación y de tatuajes», aunque con diversas limitaciones.
Autoridades estaduales argumentan que la reapertura es posible porque disminuyeron las infecciones y la red hospitalaria tiene suficientes camas disponibles.
Río es la segunda ciudad más afectada por la Covid-19 en el gigante suramericano (detrás de Sao Paulo), al registrar más de 10 mil muertes y 116 mil casos confirmados de la enfermedad.
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