A cuatro meses de asumir la presidencia semestral del bloque comunitario, Sánchez habló este lunes en la sede la Cancillería donde destacó que España confía en hacer aportes relevantes a la dinámica de funcionamiento de la UE.
Reconoció impactos negativos sufridos por la pandemia de la Covid-19 y la guerra en Ucrania, que afectaron el correcto funcionamiento del Mercado Único perturbaron las cadenas de suministros de material sanitario, semiconductores, energía y Alimentos.
El jefe del Ejecutivo español encomió a las instituciones de la UE y los Estados miembros que puesto en marcha varias iniciativas que buscan dar respuesta a este problema siguiendo el marco de “Autonomía Estratégica Abierta” sugerido por la Comisión Europea.
Sánchez detalló que dentro del contexto continental, España impulsará durante su presidencia un proyecto intergubernamental de investigación que empleará un enfoque multidisciplinario, empírico y prospectivo para analizar cuáles son las principales vulnerabilidades estratégicas de la UE.
Lo hará en cuatro áreas claves (energía, alimentación, salud, y tecnologías digitales), las maneras más eficaces de afrontarlas, y los efectos que podría tener en la ciudadanía y en las empresas.
Anunció, asimismo, que en octubre, los jefes de Estado o de Gobierno de los 27 Estados Miembros se reunirán en la ciudad andaluza de Granada para
discutir el futuro de la Autonomía Estratégica Abierta y otras prioridades estratégicas de la UE.
Además, el presidente del Gobierno de España comentó que durante todo el año se celebrarán
varias reuniones de trabajo y foros de alto nivel para discutir la agenda estratégica europea.
Sánchez admitió que si bien la UE es en sí misma un milagro, la deslocalización de funciones destapó una serie de vulnerabilidades reveladas en particular durante la pandemia y el conflicto en Ucrania.
Puntualizó que ante conflictos internacionales, la competitividad, los desafíos del cambio climático, el crecimiento demográfico y el blindaje del comercio de Estados Unidos y China, a Europa le corresponde prepararse mejor para enfrentar los retos que se avecinan.
La búsqueda de una mayor autonomía estratégica, que sea a su vez socialmente justa y medioambientalmente sostenible, son aspectos en los que pondrá énfasis la presidencia de España de la UE que asumirá a partir del 1 de julio.
“Debemos responder a este desafío y debemos hacerlo con contundencia y con confianza. Sabiendo que, aunque tenemos vulnerabilidades serias, los
europeos ocupamos también una posición geopolítica de gran fortaleza”, remarcó Sánchez.
Pidió al respecto más integración, más multilateralismo y un mayor liderazgo internacional”.
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