Las directrices publicadas en la revista JACC:Advances abarcan “ la evaluación, detección y seguimiento de enfermedades cardiovasculares para pacientes pediátricos que reciben tratamiento contra el cáncer con nuevas terapias moleculares, inmunoterapia, quimioterapia y radioterapia”.
Las complicaciones cardíacas son una de las principales causas de muerte de los casos de cáncer infantil, solo superadas por la recaída de la mencionada dolencia, explicaron los expertos.
Ellos tienen 15 veces más probabilidades de tener insuficiencia cardíaca y ocho veces más riesgos de tener una enfermedad de ese tipo que la población general.
Los especialistas alertaron que tratamientos modernos, incluida la medicina de precisión pueden causar problemas cardiovasculares, de ahí que las pautas son indispensables para reducir el impacto nocivo de los medicamentos contra el cáncer en los corazones de los infantes.
«Las directrices son un gran avance para el campo de la cardiooncología, ya que antes de esto no había un enfoque definido para la vigilancia o el seguimiento de los pacientes pediátricos durante el tratamiento, a pesar de que las nuevas terapias tienen complicaciones cardíacas tempranas, como presión arterial alta, latidos cardíacos anormales e insuficiencia cardíaca», subrayaron los científicos.
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