La novena boricua tiene una sola victoria en cuatro salidas y se encuentra prácticamente sin margen de error, mientras sus rivales están un poco más cómodos con 2-2.
Los curazaleños han mostrado un pitcheo de excelencia, con promedio de apenas 1.76 carreras limpias por cada nueve entradas (segundos), mientras que los puertorriqueños, con 4.50, son penúltimos.
A la defensa se invierten los roles, porque La Tribu exhibe cuatro errores y sus contrarios seis, aunque a estos últimos los ha ayudado la facturación de seis jugadas de doble matanza.
En cuanto al bateo, ambas novenas marchan muy parejas, para mal, pues ocupan los dos últimos lugares, con average de .213 los de Borinquen, y .203 los de la excolonia holandesa.
Entre ambos equipos un solo bateador supera los .333, y es el curazaleño Sharlon Schoop, bujía de los suyos.
Si los boricuas lo logran mantener a raya, seguramente podrán seguir respirando en Gran Caracas 2023.
mem/lp
