“Si cada familia tuviera solo dos hijos, llegaríamos a 142 millones, pero si la cifra crece llegaremos a 157 millones”, advirtió el jefe del Consejo Nacional de Población, Tarek Tawfik.
Algunos países, como China y Singapur, aprobaron leyes para controlar el crecimiento desbocado de su población, pero es bastante difícil hacer lo mismo aquí, señaló.
Recordó que en 1951 esta nación tenía 21 millones de habitantes, una cifra que saltará a 205 millones en 2100.
También la notable mejora en las condiciones de salud en Egipto disminuyó la tasa de mortalidad, lo cual contribuyó a este aumento, manifestó el experto.
La ministra de Planificación y Desarrollo Económico, Hala El-Saeed, afirmó el pasado mes que es difícil avanzar en los objetivos de desarrollo sostenible sin lograr un control de las tasas de crecimiento poblacional.
A principios de año, la calificadora Fitch afirmó que esta nación norafricana podría superar los 158,8 millones de habitantes para 2050.
Según estimaciones anteriores de la Agencia Central de Movilización Pública y Estadísticas, el país podría alcanzar los 192 millones de personas para 2052 si continúan las tasas de crecimiento actuales.
Pero la proyección podría bajar a 143 millones si tienen resultados los esfuerzos del Gobierno para reducir las tasas de fertilidad.
Recientemente, el Centro de Apoyo a la Información y las Decisiones del Gabinete cifró en 160 millones la cantidad de personas que vivirán aquí a mediados de siglo.
Las autoridades estiman que el Estado necesitará duplicar su gasto en proyectos de infraestructura y desarrollo en los próximos 30 años para enfrentar el acelerado crecimiento poblacional.
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