En un estadio Vélodrome delirante, con un récord de asistencia de más de 65 mil personas, los locales no pudieron contener en el clásico la magia de las superestrellas rojiazules, que se combinaron de maravillas para alejar a los Focenses a ocho puntos en la batalla por la cima de la Ligue1.
Marseille jugaba bien y con peligro en el arco defendido por Gianluigi Donnarumma, pero en el minuto 25 Messi habilitó a Mbappé, quien marcó su decimosexto gol, y apenas cuatro minutos después el francés devolvió el favor al argentino, autor de 12 dianas.
Después del descanso, los anfitriones pusieron presión y un error de Donnarumma casi permite el descuento, sin embargo, los genios volvieron a frotar la lámpara en el 55 y Leo llegó a 12 asistencias (líder) y Kiki amplió con 17 su ventaja entre los máximos artilleros.
Para los parisinos la victoria representó además de una revancha, tras ser eliminados por el Olympique de la Copa de Francia este mes, un estímulo de cara al partido de vuelta, el 8 de marzo, de los octavos de final de la Liga de Campeones contra el Bayern Múnich, vencedor en la ida 1-0 en el Parque de los Príncipes.
Aunque restan 13 fechas por jugar, la Ligue1 parece decidida con los 60 puntos del PSG, no así la segunda plaza –la otra que otorga boleto directo a la Champions- ya que el Marseille quedó en 52, seguido muy de cerca por Mónaco y Lens con 50, sin olvidar a Rennes (46) y a los mejorados Lille (44) y Nice (41).
La otra punta del tridente galáctico capitalino, el brasileño Neymar, no jugó esta noche en el Vélodrome por su lesión de tobillo, mientras el defensor Presnel Kimpembe, atacado por lesiones desde noviembre, tuvo que abandonar el encuentro en la primera mitad lastimado.
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