El nivel de la inflación trepó el mes pasado al 9,2 por ciento propulsado por un alza de hasta el 11 por ciento en algunos productos de la canasta básica, señala el reporte de la Oficina Nacional de Estadísticas (KNBS, siglas en inglés).
Los datos son mala noticia para la mayoría de los kenianos, muchos de los cuales son desempleados o sobreviven en la vasta red de la economía informal y respiraron con alivio durante tres meses, entre noviembre y enero, cuando los niveles inflacionarios mostraron saludable tendencia al descenso.
Lo peor de la situación es que entre los productos afectados aparecen las coles, zanahorias, tomates y las berzas, casi el pan nuestro de cada día en los platos de la población más vulnerable, y la leche fresca, señala elk texto de la KNBS.
El gas de uso doméstico, asimismo, subió el mes pasado 4,7 por ciento.
A pesar de las alzas, el ente estadístico señala que otros bajaron, entre ellos la harina de trigo y la de maíz, descendieron 2,4 y 2,5 por ciento en ese orden y el azúcar descendió 3,2, aunque se abstiene de explicar las razones.
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