Los siniestros devastaron alrededor de una veintena de centros de enseñanza y obligaron al Ministerio de Educación (Mineduc) a aplazar el inicio de las clases en las comunas de Coronel, San Pedro y Santa Juana, de la región del Biobío.
“Como una medida excepcional, acogiendo la solicitud de algunos alcaldes y alcaldesas y entendiendo que hay una tarea preventiva de cuidado de las familias, vamos a aceptar la solicitud de tres comunas para iniciar su año escolar el 13 de marzo”, dijo el ministro de esa cartera, Marco Antonio Ávila.
En el resto del país el curso comienza hoy con la entrada de los profesores, aunque será hasta el viernes el ingreso de los estudiantes a las aulas.
Previo al retorno de las clases, alumnos de nivel secundario convocaron para el 9 de marzo a un “mochilazo estudiantil” con el fin de exigir mejoras en los establecimientos educacionales, resolver las carencias en los programas de alimentación y una educación no sexista.
Según el titular del Mineduc, se han hecho esfuerzos para mejorar algunos centros más antiguos con mayor deterioro en las infraestructuras, si bien no cuentan con los recursos para renovar todo un liceo.
Ávila reconoció que las demandas de los estudiantes siempre son válidas, pero exhortó a los jóvenes a movilizarse de manera pacífica y sin interrumpir la docencia.
De acuerdo con el ministro de Educación, las puertas de esa dependencia están abiertas para sentarse a conversar y resolver los conflictos a través del diálogo.
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