La producción del sector turístico siguió fortaleciéndose, apoyada por las ganancias en el segmento aéreo de alto valor añadido y el repunte del tráfico marítimo, detalló el texto.
Mayores resultados de la llamada industria sin chimeneas conllevarán a un impulso económico en 2023, no obstante persisten riesgos relacionados sobre todo con factores exógenos, señaló.
Mencionó entre ellos nuevas mutaciones del virus SARS-CoV-2, causante de la Covid-19, que podrían socavar los avances logrados en el frente sanitario internacional y perturbar la actividad del sector de viajes.
«Además, la subida de los precios mundiales del combustible limitaría la competitividad del turismo, mientras que las políticas antiinflacionarias restringirían la capacidad de gasto de los principales consumidores de los mercados de origen», acotó.
Prevemos que los proyectos nuevos y en curso impulsados por la inversión extranjera proporcionen apoyo a la construcción y, por extensión, contribuyan al crecimiento económico, aseguró el Banco Central de Bahamas.
Esta nación, situada en el Caribe y con una población de 389 mil 482 habitantes, posee una economía dependiente del turismo y las actividades bancarias.
Las restricciones debido a la Covid-19 supusieron en 2020 una fuerte contracción del 14,87 por ciento de su producto interno bruto. Sin embargo, aumentó un 4,5 en 2021 y más de un 10 el último año, según cifras oficiales.
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