Reportes mediáticos indicaron que las fuerzas del M23 ganaron posiciones en la oriental provincia de Kivu del Norte, fundamentalmente en torno a la ciudad de Goma, la capital del territorio, luego de lanzar una ofensiva sobre Kirotshe y Shasha, en las orillas del lago Kivu.
Sin embargo, un comunicado previo del M23 anunció que sus integrantes estaban dispuestos a interrumpir las acciones bélicas este 7 de marzo a las 12:00, hora local, para “abrir la vía a un diálogo directo” con el Gobierno nacional, como fue acordado días antes en la capital de Angola, la cual funge como mediadora.
Asimismo, la agrupación reiteró su “disponibilidad para resolver de forma pacífica el conflicto”, aunque dijo reservarse el derecho a la defensa en caso de ser atacado por las fuerzas de la coalición castrense a favor del Ejecutivo.
Aseguró además que “no escatimará esfuerzos para proteger a la población civil y sus bienes” y agradeció “las decisiones adoptadas en diferentes cumbres regionales” en Burundi, Kenya y Etiopía, así como la mediación de Angola, “todas ellas destinadas a encontrar una solución pacífica” a las confrontaciones en el este del país.
También resulta llamativo un video difundido por la red social de Twitter en el que el portavoz de Kivu del Norte, el teniente coronel Guillaume Ndjike, pidió a la población «no atacar a los diversos contingentes desplegados como parte de la fuerza regional de la Comunidad de África Oriental», es decir, a tropas que combaten al M23.
Una delegación del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) prevé trabajar aquí hasta el próximo domingo a fin de evaluar la situación en el terreno y la implementación de su misión en la RDC, la Monusco. Según el anuncio, tendrán reuniones con el presidente Félix Tshisekedi, el primer ministro, Jean-Michel Sama Lukonde, y con representantes de la sociedad civil y el cuerpo diplomático.
Durante la visita a Goma, pretenden evaluar la situación humanitaria mediante encuentros con las autoridades provinciales, representantes de grupos de mujeres o desplazados, indicó la Monusco.
Al decir del teniente coronel Ndjike, la lucha sigue en marcha en Kivu del Norte, y “ante los crímenes de lesa humanidad (…) y esta enésima violación de la voluntad de jefes de Estado”, las Fuerzas Armadas de la RDC apelaron a la comunidad internacional “para tomar nota de estos graves hechos y extraer todas las consecuencias necesarias”.
El secretario general de la ONU, António Guterres, condenó este martes “toda la violencia contra civiles” y renovó su llamamiento “a todos los grupos armados congoleños y extranjeros para que depongan las armas”.
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