La semana pasada, el presidente Jovenel Moïse extendió por otro mes el mandato del jefe de Gobierno provisional, Claude Joseph, pese a que la Constitución vigente no contempla esa prórroga.
Moïse adoptó una disposición similar en 2019, cuando Jean Michel Lapin se mantuvo en ese mismo cargo por casi un año.
De acuerdo con Exantus, el jefe de Estado tomó una decisión lúcida y altamente política, obligado por la situación actual, al preservar a Joseph en el puesto para liquidar los asuntos de actualidad.
Varias fuentes aseguraron recientemente que estaban en marcha las negociaciones para conformar un gabinete plural, que incluyera a las voces opositoras, e incluso Exantus adelantó que se valoraban cinco personalidades para asumir el cargo de primer ministro.
Joseph, por su parte, durante su primera conferencia de prensa al frente del Ejecutivo, alentó a las fuerzas contestatarias a dialogar con el Gobierno para la formación de una administración sólida.
‘Los actores haitianos deben buscar su propia solución. La composición del próximo gobierno demostrará que las negociaciones se llevaron a cabo y que han dado sus frutos’, dijo este lunes Exantus, para desmentir que las discusiones se encuentran en punto muerto tras la renovación de Joseph.
Añadió, asimismo, que el nuevo gabinete reflejará una apertura a la oposición y tendrá que abordar los problemas del país.
Sin embargo, grupos opositores como el Sector Democrático y Popular, se desmarcaron de la composición de la administración, e incluso alertaron a sus aliados a no traicionar las reivindicaciones populares.
‘Ni referendo ni elección con Jovenel Moise. Se debe respetar el artículo 134-2 de la Constitución’, escribió en Twitter André Michel, abogado y portavoz de la plataforma y reiteró que el mandato constitucional del gobernante terminó en febrero último.
oda/ane