El gobierno dominicano busca minimizar la falta de agua en los hogares y reducir el impacto en la producción agropecuaria, agregó el funcionario.
A la par llamó a los ciudadanos a economizar el preciado líquido y “mantener la paciencia hasta que se logre superar la presente adversidad climática”.
“La sequía ha impactado negativamente el caudal de nuestro sistema de grandes presas. Sabana Yegua, Sabaneta, Tavera-Bao, Monción, Rincón, Hatillo, Jigüey, Valdesia, Maguaca y Chacuey sufren una reducción promedio de un 60 por ciento de su caudal normal y la situación es particularmente crítica en el Cibao Central”, precisó.
Respecto a las presas de Rincón, Hatillo y Tavera-Bao, indicó que estas redujeron su caudal normal de agua en un 85 por ciento promedio, lo cual aseguró afecta el suministro para consumo humano y para la producción agropecuaria.
Finalmente, Figueroa dijo que el país sufre la peor sequía desde 1997. Durante los últimos cuatro meses, las lluvias en todo el territorio nacional fueron por debajo de los valores normales, aunque afecta con mayor rigor ahora en marzo.
Y sostuvo que el período de sequía estacional de cada año, abarca los meses de noviembre hasta abril “y en condiciones normales termina con las lluvias de mayo; pero no estamos en condiciones normales”.
mem/ema