Para que no se olvide esa oscura etapa en la historia nacional, el Ministerio de Derechos Humanos organizó a lo largo de la semana eventos con la intención de preservar la verdad de quienes fueron víctimas del régimen castrense y vigorizar la democracia y la justicia social.
En ocasión de la fecha, grupos de derechos humanos protestaron este sábado en Sao Paulo contra el autoritarismo.
Frente a un predio reconocido como uno de los principales centros de reclusión y tortura en la dictadura, manifestantes se agruparon y vociferaron expresiones contra ese tenebroso periodo.
Entre las voces se escucharon condenas contra la arbitrariedad de torturadores y asesinos de ayer y de hoy, así como se aludió a causas judiciales que enfrenta el derrotado mandatario Jair Bolsonaro, nostálgico del régimen militar.
También hubo un bloque de calle en un sector de la zona sur de Sao Paulo, con la intención de «recordar para que no se repita».
El denominado Cordón de la Mentira ganó arterias del barrio reuniendo artistas, movimientos sociales y personas para rememorar las torturas, asesinatos y desapariciones forzadas.
Llamó la atención que el reconocido actor José de Abreu recordó en la red social Instagram cuando fue detenido durante tres meses durante la dictadura militar.
El popular artista compartió una foto antigua en el período de la prisión y otra imagen de su madre Gilda Abreu, que luchaba por la libertad de su hijo en las protestas callejeras en 1968.
De Abreu utilizó en la publicación las etiquetas «Dictadura nunca más», «Por el fin de la amnistía a torturadores», además de «Odio y asco», que se hizo viral en Twitter.
La víspera, en un acto político organizado por el Distrito Drag, las Drag queens (personaje andrógino sin tener que imitar a una mujer u hombre) ocuparon áreas del centro de Brasilia para recordar las violaciones de derechos humanos perpetradas durante esa etapa.
Con sus actuaciones denunciaron el contenido llamado LGBTfóbico del régimen antidemocrático iniciado hace 59 años.
Por medio de realizaciones musicales, las artistas, con apoyo del público, reforzaron: «¡dictadura nunca más!».
La Comisión Nacional de la Verdad, creada por ley en 2014, presentó un informe final y concluyó que la práctica de detenciones arbitrarias, tortura, ejecuciones, desapariciones y ocultación de cadáveres eran el resultado de una política estatal contra la población civil, calificándolas de crímenes de lesa humanidad.
En total, se identificaron 434 casos de muertes y desapariciones de personas bajo la responsabilidad del Estado brasileño durante el periodo 1946-1988.
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