La movilización fue convocada por el primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela, Diosdado Cabello, quien manifestó se movilizará no solo la militancia de la mayor organización política del país, sino también todas las fuerzas revolucionarias.
Esta es una “semana de recuerdos, de presente y de momentos de gran victoria popular”, afirmó, y agregó que el 11, 12 y 13 de abril significó verle la cara al monstruo del fascismo y ver también a un pueblo rescatar a su líder Hugo Chávez (1954-2013).
En conferencia de prensa, el dirigente político recordó el odio y la arrogancia percibida en aquellos momentos en que sectores empresariales, unidos a la jefatura sindical de la época, Fedecamaras y la jerarquía eclesiástica, le declararon la guerra al gobierno revolucionario.
Consideró importante que los jóvenes venezolanos conozcan lo que ocurrió y “esa parte de la historia no se pierda” para saber de dónde veníamos y el porqué de los hechos de aquellos días.
El también diputado a la Asamblea Nacional rememoró que se venía de una ley habilitante, que aprobó una legislación de hidrocarburo, de pesca, de tierra, y fue entonces cuando los sectores de la derecha enfrentaron al gobierno.
Cabello remarcó que se produjo uno de los hechos más importantes en la historia de Venezuela como fue la unión cívico militar de nuestro pueblo, unido pidiendo se le devolviera al comandante Chávez, apostilló.
La jornada conmemorativa estuvo precedida, martes y miércoles, por foros, seminarios y conferencias para hablar de los sucesos de abril, en los que en menos de 48 horas la derecha fascista, aupada por Estados Unidos, se estrelló contra la voluntad de todo un pueblo en defender a su presidente.
A través de Twitter, el mandatario Nicolás Maduro reconoció ayer como fundamental el papel orientador de los medios de comunicación alternativos y comunitarios para el éxito de la Revolución cívico-militar de abril.
También afirmó que el asedio a la embajada de Cuba, el 12 y 13, pasó a la historia de nuestro continente, como la expresión más bárbara de la intolerancia fascista.
A los sectores apátridas hoy les recordamos que su arrogancia jamás destruirá la hermandad que existe entre Cuba y Venezuela, aseguró.
En un acto de desagravio en la embajada de la isla en Caracas, funcionarios de ambos países patentizaron la víspera la unidad y solidaridad inquebrantables de Gobiernos y pueblos cubano y venezolano.
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