A una pregunta en su conferencia de prensa matutina en el Palacio Nacional formulada por un periodista británico, el mandatario resaltó la política exterior internacionalista y humanista de su Gobierno.
Al argumentar ese tipo de relación con los pueblos de América Latina y en todo el mundo, y con las organizaciones que defienden a los trabajadores y a los pueblos, así como lo pendiente que está su Ejecutivo de que no se cometan violaciones de los derechos humanos, mencionó nuevamente a Perú.
Dijo que no va a dejar de manifestar la protesta por lo sucedido en ese país de Sudamérica aunque le moleste mucho a su oligarquía, pero allí se cometió una gran injusticia al destituir al presidente legal, Pedro Castillo, y todo se originó porque en el Perú domina un grupo que está al servicio de una oligarquía de la minoría rapaz de esa población, tanto local como foránea.
Entonces los que tenían el control político en el Perú perdieron la elección porque la mayoría del pueblo quiso a Castillo, que viene de la tierra y usa sombrero, pero como son muy clasistas y racistas empezaron con una campaña en su contra.
En el Congreso, dominado por los políticos tradicionales, anunciaron un trámite para destituirlo y luego otros varios hasta que lo lograron, y me llamó la atención que la primera que se manifestó a favor del golpe ilegal contra Castillo es la embajadora de Estados Unidos, que avaló de inmediato la posición ilegal y arbitraria del congreso, y eso lo vamos a seguir denunciando, apostilló.
Castillo está injustamente preso, y es una violación flagrante a la libertad, mientras la mayoría de los medios de información convencionales, la presa mas famosa en el mundo, calla de manera cómplice, dijo.
Esa postura, repitió, la vamos a seguir manteniendo en defensa también de los migrantes, no solo de los mexicanos, sino del mundo, porque nadie abandona su patria por gusto sino por necesidad.
Y los responsables del éxodo, en vez de buscar atender las causas del fenómeno migratorio les dan la espalda y acrecientan los dolores de la humanidad porque siguen actuando en su propio provecho.
Añadió que lo más importante es atacar las causas, combatir la pobreza en la región y en el mundo como dijo en las Naciones Unidas cuando denunció que m´s de mil millones de personas en el mundo viven con un dólar diario mientras que una minoría acapara muchísima riqueza.
Esa postura, finalizó, la vamos a mantener, pero no podríamos hablar de estos temas si no tuviésemos autoridad moral, si no se aplicara en México una política en favor de los pobres como lo estamos haciendo, o con una posición radical contra la corrupción.
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