A un año del asesinato de la periodista Shireen Abu Akleh, los militares continúan sus crímenes contra los palestinos a la vista del mundo, que no mueve un dedo para brindar protección a ese indefenso pueblo, señaló la organización citada por el portal noticioso Al Quds.
A pesar de todas las evidencias sobre el caso de Abu Aqleh, “la Corte Penal Internacional aún se muestra reacia a activar procedimientos de enjuiciamiento contra los perpetradores”, subrayó.
Según la oficina de medios de comunicación de las autoridades de la franja de Gaza, las tropas israelíes cometieron 895 violaciones contra los periodistas en los territorios ocupados en 2022.
La institución citó en un comunicado que entre los crímenes ejecutados el pasado año están los asesinatos de las comunicadoras Aqleh y Ghofran Warasnah.
La primera murió por un disparo en la cabeza mientras cubría una redada del Ejército israelí en el campamento de refugiados de Jenin, ubicado norte de Cisjordania, y la segunda también por una bala cerca de la sureña ciudad de Hebrón.
Durante esos 12 meses, 187 periodistas o trabajadores del sector resultaron heridos por balas, golpes o fueron utilizados como escudos humanos, mientras 149 sufrieron arrestos o deportación.
También se reportaron 59 casos de allanamiento de viviendas o de oficinas y de destrucción de equipos de prensa.
La oficina también criticó los decomisos de equipos, el cierre de medios, las amenazas y los numerosos casos de hostigamientos e imposiciones de multas económicas.
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