El proyecto presentado por el gobierno será debatido en la mañana por el Senado y en la tarde estará a la aprobación de los diputados.
La exposición de motivos de la iniciativa toma en cuenta la situación de sequía que afecta a la mayoría de los cursos y principales reservas de agua utilizadas para abastecer a esta capital y la zona metropolitana, donde viven dos millones de uruguayos.
Mientras tanto, se conoció que la administración de Obras Sanitarias del Estado (OSE) evalúa cómo proceder respecto a la elevación de los niveles de cloruros y sodio para estirar las reservas de agua en la presa de San Severino, fuente de abasto capitalina.
Medios de prensa aseguran que OSE solicitó al Ministerio de Salud Pública la habilitación para duplicar los actuales niveles de esos componentes del agua que sale por los grifos.
Se trata de un líquido que ya tiene alterados sus niveles de cloruros y sodio, no potable aunque bebible, según el ministro de Ambiente, Robert Bouvier.
La emergencia hídrica decretada por Lacalle Pou contempla además inversiones por 20 millones de dólares para la construcción de una represa en el río San José y un ducto que lo conecte con el río Santa Lucía, que alimenta el embalse de San Severino.
El mandatario además decidió centralizar la información que se le brinde al público sobre el tema.
mem/ool