Entre enero y junio de este año 21 personas fueron dañadas por el estallido de estos artefactos y tres de ellas murieron, mientras otras seis quedaron discapacitadas permanentemente, detalló en un informe la Autoridad de Acción contra las Minas y Asistencia a las Víctimas de Camboya (CMAA, por sus siglas en inglés).
De acuerdo con la entidad, la mayor parte de los perjudicados (16) eran hombres adultos. Los restantes damnificados fueron cuatro niños varones y una mujer.
La reducción en el número de víctimas de las minas terrestres y los restos explosivos de guerra en el Reino fue atribuida por el primer vicepresidente de la CMAA, Ly Thuch, a los esfuerzos y recursos destinados por el gobierno para educar al público sobre los peligros de esos artefactos.
También incide en ello el trabajo desplegado por la CMAA en la colocación de señales de advertencia en lugares que se cree pudieran estar contaminados, añadió.
El número de víctimas de las minas terrestres y los restos explosivos de guerra en Camboya en el primer semestre de 2022 ascendió a 40, mientras entre 1992 y el pasado año se limpiaron dos mil 579 kilómetros cuadrados de tierra infestada beneficiando a más de nueve millones de personas.
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