Nelvis Gómez, directiva de la filial del Citma en la occidental provincia de Matanzas, explicó que la política trazada en este campo tiene el propósito de corroborar al afamado polo turístico de manera integral por el funcionamiento de su playa.
En tal sentido Gómez precisó sobre el lauro Playa Ambiental (PA), el cual tiene el objetivo de contribuir a mejorar la atención y sostenibilidad de las riberas y ayudar a la gestión de los operadores de estos entornos.
‘Tiene como vías indispensables capacitaciones para los especialistas que usan y manejan este valioso medio natural, acerca de los procesos geomorfológicos, funcionales y legislativos que rigen todo el uso de este recurso clave’, agregó.
La categoría de Playa Ambiental otorga un valor agregado a los hoteles cercanos al ofrecer al turista un producto de excelencia para los baños de mar y la iniciativa se encuentra dentro de la Tarea Vida, estrategia del Estado cubano para enfrentar el cambio climático.
Esa condición de PA, destacó Gómez, permite al país participar con éxito en eventos internacionales al incrementar la idoneidad como destino de sol y disfrute de las costas.
Varadero dispone de 20 kilómetros de playa en la península de Hicacos, en el norte de Matanzas, y el control del bello paraje tanto del agua marina como de la vegetación nativa es responsabilidad del Centro de Servicios Ambientales del territorio.
Datos estadísticos precisan que para la sostenibilidad de este vital destino de la isla se vertieron más de tres millones de metros cúbicos de arena desde 1985 a la fecha.
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