En un acto por el Día de la Independencia de Venezuela, en el que participaron miembros del cuerpo diplomático, senadores y amigos de la vecina nación, Martínez enfatizó que no hay sanciones ni presiones que puedan aislarlos de ese compromiso.
Con la colocación de una ofrenda floral en el busto del Libertador Simón Bolívar en la residencia del embajador en Bogotá, comenzó la celebración de la firma del Acta de la Declaración de la Independencia que puso fin a los lazos entre la Capitanía General de Venezuela y la corona española.
El espacio fue propicio para recordar que el 19 de abril de 1810, con la participación activa del pueblo fue depuesto el capitán general Emparán, el Ayuntamiento de Caracas asumió el ejercicio de la autoridad y el 5 de julio de 1811 se firmó el Acta de la Independencia.
“Nosotros, pues, a nombre y con la voluntad y autoridad que tenemos del virtuoso pueblo de Venezuela, declaramos solemnemente al mundo que sus Provincias unidas son, y deben ser desde hoy, de hecho y de derecho, Estados libres, soberanos e independientes y que están absueltos de toda sumisión y dependencia de la corona de España”, señala el histórico documento.
Durante la actividad fueron recordadas las guerras luego del nacimiento de una República soberana, para consolidar con sangre la decisión del pueblo que se logró finalmente a través de la gesta libertadora de Bolívar.
En declaraciones a Prensa Latina el embajador destacó el restablecimiento de las relaciones de Colombia y Venezuela, dos países que -dijo- son mucho más que vecinos y hermanos, al aludir a las luchas independentistas, a la geografía y a la cultura que los une.
Asimismo, aseguró que las relaciones de estos dos países, retomadas tras la asunción de Gustavo Petro a la presidencia, tienen una importancia capital para Latinoamérica.
En estos momentos hay una necesidad imperiosa de retomar algunos proyectos de integración que se quedaron truncados hace algunos años y fortalecerlos, recordó.
En su opinión, la reanudación de los vínculos diplomáticos, políticos, económicos y comerciales, «dan un paso al frente en esa óptica que tenemos sobre la integración y la unidad latinoamericana y caribeña».
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