Tal elemento supuso una sacudida para los mercados al comienzo de una semana repleta de reuniones de bancos centrales en las que los inversores esperan subidas de tasas de interés en Europa y los Estados Unidos.
La moneda común europea descendió 0,4 por ciento, a 1,1083 dólares, tras una tranquila sesión en Asia, luego de que los datos de los índices PMI mostraron que la actividad empresarial de la zona euro se contrajo mucho más de lo esperado en julio.
Por su parte, la libra esterlina cedió tras los datos de actividad británicos, pero de forma menos drástica y bajó 0,1 por ciento, a 1,2839 dólares.
Los inversores tendrán mucho que analizar esta semana, pues el próximo miércoles concluye la reunión de la Reserva Federal, de Estados Unidos, un día después la del Banco Central Europeo (BCE) y el venidero viernes la del Banco de Japón, así como los resultados de muchas grandes empresas.
El yen se fortalecía, con el dólar bajando 0,47 por ciento, a 141,2 yenes; y el euro declinó 0,7 por ciento, a 156,6 yenes. El franco suizo opera estable en 0,8648 unidades por dólar.
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