La postura del titular de Asuntos Exteriores fue expresada durante su reunión en la sede del Ministerio con representantes de todas las organizaciones de las Naciones Unidas y sus agencias que operan en Siria.
El jefe de la diplomacia siria instó a estos organismos a alzar la voz para anular de inmediato las medidas coercitivas unilaterales y responsabilizar a estos países del sufrimiento humano de los sirios.
Asimismo, condenó el corte intencional del agua potable sobre un millón de civiles en la provincia nororiental de Hasakeh por parte de las fuerzas turcas y sus grupos de mercenarios locales.
El Ministro reiteró que Damasco está tomando las medidas apropiadas para asegurar un regreso digno y seguro de los refugiados sirios.
Además, denunció la falta de financiación a los proyectos de recuperación temprana de las secuelas de la guerra, y reiteró que el Gobierno tomó medidas para facilitar el acceso humanitario a todas las partes del país.
Por su parte, los representantes de los organismos internacionales manifestaron que están plenamente conscientes sobre la magnitud de las duras condiciones de vida de los sirios.
Aseguraron que harán mayor empeño para mejorar la labor humanitaria y atender las crecientes necesidades humanitarias en la nación árabe, además de trabajar para transmitir la realidad del sufrimiento experimentado por el pueblo sirio.
jha/fm