Junto a la película del Premio Nacional de Cine (2007) Fernando Pérez, compiten dos largometrajes de ficción en este apartado: Bajo un sol poderoso, de Kiki Álvarez y La espera, de Daniel Ross, ambas del año 2022.
En el caso de los largometrajes documentales figuran Virgilio desde el gabinete azul (Raydel Araoz, 2022); Cosme, un enorme juego con el tiempo (Alejandra Rodríguez Segura, 2022) y Retorno (Blanca Rosa Blanco, 2023).
Mientras, los cortometrajes de ficción llegan en manos de Gemini (Orlando Mora, 2022); Blank (Daniel Santoyo, 2022); El aniversario (Patricia Ramos, 2023) y Patadas (Pablo Massip, 2023).
A estos se suman los cortometrajes documentales El peso de la quietud (Manuel Ojeda, 2022); Diez años después (Iraida Tamayo Ferras, 2023) y Todos los días son 8 de marzo (dirigido por Lizzete Vila, Sergio Cabrera e Ingrid León, 2023).
El largometraje animado La Súper (Ernesto Piña, 2022) y el cortometraje Era Nomeolvides (Carlos A. Rodríguez Almora, 2021), son las obras cubanas que concursan en esta categoría.
El mundo de Nelsito, que se exhibe por estos días en los principales cines de esta capital y en salas de las cabeceras provinciales de Cuba, es resultado de la colaboración entre el Instituto Cubano de Arte e Industrias Cinematográfico (Icaic) y la productora española Wanda Films
Nelsito, protagonista del filme, es un adolescente autista de 16 años que se escapa de casa y mientras todos se preocupan por él, este muestra, gracias a su imaginación, diferentes escenarios que vinculan a las personas a su alrededor.
Cuando regresa a su hogar, es el espectador quien debe determinar la naturaleza real de los personajes y qué tan ciertas son las percepciones del chico.
Reconocidas figuras de la cinematografía nacional como Isabel Santos, Laura de la Uz, Jacqueline Arenal, Carlos Enrique Almirante, Paula Alí, Edith Massola y Mario Guerra, integran parte del elenco de esta producción.
Uno de los deseos expresados por su director es que sus películas lleguen al público cubano, donde logra un vínculo especial y posibilita la comprensión total de las historias que narra.
Cuando el festival apague sus proyectores este 5 de agosto, numerosas piezas, entre nacionales y foráneas, alzarán su estatuilla como reconocimiento a un cine que deviene modelo de animación cultural y desarrollo local de un pueblo.
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