El mercado internacional muestra una tendencia al alza por recortes de producción de los países exportadores en más de 1,5 millones de barriles de petróleo, explicó ante la prensa el titular.
Tal situación llevó a que los precios de sus derivados sean más elevados en esta última quincena, precisó, y ejemplificó que a nivel nacional sucedió más o menos lo mismo.
El diésel ascendió en promedio 6,30 quetzales (casi un dólar) en las pasadas dos o tres semanas; mientras la gasolina 4,80 (alrededor de medio dólar), detalló.
Añadió que además de la reducción de la producción se registran paros en mantenimiento en refinerías de Estados Unidos y el aumento de la demanda en el hemisferio norte, lo cual afecta, subrayó.
Arita, nombrado al frente de la cartera el pasado mes, se retractó de la idea anunciada de presentar iniciativas en el Congreso para la aprobación de subsidios, como se hizo anteriormente.
La población en Guatemala manifestó por diferentes vías su preocupación ante la subida de precios de los combustibles, encarecidos alrededor de tres quetzales (casi medio dólar) por galón durante el concluido julio.
Luego de unos 90 días sin registrarse movimientos bruscos, estos se observaron en las últimas dos semanas del mes, confirmó entonces el vicetitular del organismo en cuestión Luis Ayala, a cargo del área de Hidrocarburos.
Este comportamiento es cíclico –reflexionó-, ocurre todos los años, durante los meses de julio y agosto, aunque a principios de septiembre se comienza a observar una baja en el precio local de los combustibles, enfatizó.
Las pistas este lunes, según constató Prensa Latina, reflejan 37,18 por galón de especial (poco más de 4,7 dólares), la regular 38,60 quetzales por galón (casi cinco dólares) y el diésel a 30,53 (3,9 dólares).
Analistas señalan a Guatemala como el país centroamericano donde históricamente los precios son más altos, y seguirán así, porque cualquier medida paliativa no será suficiente para aliviar la situación, advierten.
Varias carreteras de este territorio permanecieron bloqueadas a mediados de noviembre del pasado año debido a los altos costos de los combustibles, la canasta básica y los medicamentos.
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